Gimnasia esperó muchos años para tener su primera victoria ante Defensa y una vez que la consiguió, la celebró a mas no poder. Teniendo en cuenta que se trata de una serie de 180 minutos lo positivo para el elenco de Sebastián es que la diferencia fue sólo de un gol ya que de a ratos el local fue superior y pudo haber ampliado.
Salvo por los últimos instantes en los que Gimnasia pareció recluirse para cuidar la ventaja y le cedió el balón a Defensa, el predominio fue del once de Ortíz. Atacó mucho por los costados, presionó en la salida y nunca le dejó hacerse fuerte al Halcón en la línea de volantes.
Silva marcó el gol de atropellada y dejó sin opciones a Unsaín, pero antes el arquero fue figura sancándole un gol a Tijanovich. Incluso luego del gol, el 22 fue clave para sostener la valla varelense (le sacó un tiro libre del ángulo a Ayala). Cuando no pudo aparecer, fue Caire quien marcó en el área grande a Hurtado y salvó a Defensa.
Para la revancha hay que mejorar mucho de manera individual. Posiblemente Gimnasia se cierre y en la mitad de la cancha el Halcón pueda crecer. Será la clave para esta serie en la que deberá cuidar el arco propio para que las chances de clasificar sean más claras.