Luego de tres partidos ganando en el suspiro final, esta vez el gol llegó bastante temprano. Eso no significa que no se haya sufrido ya que Gimnasia vendió cara su caída. Antes del partido, Beccacece apostó por González y Márquez en lugar de Tripicchio y Blanco. Justamente éste último entró de emergencia por la lesión de Togni y en la primera que tocó impulsó al zaguero tripero a mandarla a la red contra su voluntad.
Luego del gol el partido no fue brillante ni por asomo. Pero la decisión varelense de aferrarse a los tres puntos fue lo que prevaleció. Gimnasia metió hombres de ataque y el Halcón despejó todo lo que cayó en el área de Unsaín.
Blanco fue figura por su influencia en el gol y por cómo condujo arriba. Julio González fue impasable. Miranda siempre cumple. Alex se salvó de la amarilla y estará contra Boca, Uva fue amonestado y no jugará.
En la última, Hurtado pudo haber arruinado la fiesta. Pero no pudo. Nadie puede. Este equipo demostró una vez mas su alma de campeón. Aunque haya tenido que defenderse y transpirar.