Defensa y Newells jugaron el mejor partido de la fecha. En medio de un terreno de juego viciado por la enorme cantidad de agua que cayó, generaron mil situaciones cada uno y llamativamente terminaron igualando sin goles.
De entrada el protagonismo lo tuvo el local, manejando la pelota en todos los sectores del campo de juego incluso superando al once de Sebastián. En el complemento la lluvia se intensificó y a Defensa se lo vio mejor. De todas formas pasados los 15 la Lepra retomó la iniciativa y se fue contra el arco de Unsain, quien fue figura ahogándole el gol varias veces a su ex club.
Ya sobre el final, Defensa fue a buscarlo. Escaló por los costados y desperdició goles que estaban prácticamente cantados. Nico Fernández tuvo tres varios mano a mano que no aprovechó y Togni mandó a las nubes una situación que era prácticamente el triunfo (el arco rival estaba solo).
A todo esto Newells seguía exigiendo al Uno de Varela. Un auténtico partidazo. Ni la lluvia pudo impedir las estocadas de ambos y no hubo emociones de milagro. Podía haber sido para cualquiera, no fue para ninguno.
