Con la vuelta de los visitantes en Buenos Aires, la Superliga vivió un clásico duelo de hinchadas, de los que hace rato no se ve en el torneo local, aunque sí en los duelos por Copa Argentina.
La hinchada al grito de "ooh, nosotros alentamos, pongan "garra" que ganamos" alentó al equipo hacia adelante. De hecho en el festejo del primer gol, Nico Fernández miró hacia ellos con el puño apretado y exigiéndoles más aliento.
Además, faltando un minuto, Unsaín descolgó un zapatazo que se metía y toda la tribuna enloqueció saltando y defendiendo el empate.
Por Gabriel Escobar