Salvo en el mediocampo, son varios los apellidos que se repiten en el plantel pasado y este: "hicimos un esfuerzo bastante grande y pudimos mantener la base del equipo del torneo pasado. Seguramente van a seguir llegando algunos futbolistas en la posición de los volantes, que son de los que más se fueron".
¿Las metas? "Consolidar un equipo, que Defensa y Justicia se siga manteniendo entre los primeros diez puestos de la Superliga, tratar de llegar lejos en las copas (Sudamericana y Argentina) y poder superar los obstáculos", sostuvo el hijo del presidente. Y añadió: "La idea es reforzarse, no traer jugadores por traer, y buscar jerarquía. No van a venir diez jugadores más, a lo sumo tres o cuatro. Después del 18 veremos que ve Sebastián con el trabajo, si necesita algún otro jugador en algún lugar de la cancha o si se arregla con lo que tiene".
"Ahora vamos a jugar contra El Nacional que viene con ritmo y nosotros hace dos meses sin competencia, y quiérase o no, para el equipo ecuatoriano eso va a ser una ventaja", anticipa. También es optimista: "estamos en condiciones de pelear y espero que hagamos una buena diferencia de local".
Por Gabriel Escobar