Estaba claro desde un principio que el duelo ante Arsenal, pese a que ya estaba descendido, no iba a ser un trámite. Así se reflejó durante los primeros 45 en los que a Defensa le costó doblegar al despreocupado conjunto de Rondina. Tal vez por eso la visita tuvo las más claras en los primeros minutos y los de Vojvoda recién crecieron en los instantes finales.
Parecía que la ansiedad jugaba y durante el complemento si no se convertía, iba a ir creciendo poco a poco. Sin embargo en el primer minuto del ST Memo Bordagaray apareció antes de que el Tomaghello se acuerde de la importancia de los tres puntos y clavó el 1-0 que le dio tranquilidad a Varela.
Ahí fue cuando el estadio se soltó y dominó el partido pese al mal estadio del campo de juego, que fue víctima de la gran cantidad de lluvia que cayó en las últimas horas. El desahogo definitivo llegó con el gol de Bareiro. Para el final Cuqui Márquez volvió a jugar unos minutos el Matadero lo ovacionó.