La bronca por ese tiro que cambió el resultado final terminó siendo mucho mayor debido a la manera en que se dio el partido. Se le había ganado al cansancio que implicaba haber tenido dos viajes importantes en la última semana y el rival estaba ya dominado pese a que costó mucho trabajo doblegarlo.
Luego de un primer tiempo en el que hubo poco pero las claras fueron de Varela, el ST creció en emociones y la visita arrancó mejor debido a que estaba más fresco. Con las variantes el equipo de Vojvoda emparejó las acciones y luego de una contra perfecta se puso arriba.
Luego Belgrano se quedó con diez por expulsión de Quiroga y cuando todo parecía sentenciado llegó el gol del 1-1. Un resultado que fue parecido a una derrota. Tal vez Defensa no fue mejor en los 90, pero sí se sobrepuso y eso tiene un valor muy grande que finalmente no tuvo su premio.
