Defensa volvió a ser local en su cancha tras dos partidos, luego de lo que fue la fatídica caída de los tablones de la tribuna que da a Humahuaca. Por esa razón es que esa cabecera estuvo clausurada y se ocupó una sola popular.
Por pedido del Aprevide, tampoco se vendieron entradas a público que no era socio y así el estadio se vio con menos gente que la habitual. Tampoco se permitió el ingreso de algunas banderas así que se perdió el color de siempre.
No estuvo presente la barra y la tribuna nueva se ocupó a la mitad, al igual que las plateas. Muchos se quedaron afuera por no tener la cuota al día. Una vuelta a casa que no fue la esperada.